Autor: NILTON ROGER MAS ROJAS
- Señor, ya que tú todo lo puedes, conviérteme en un celular.
El Señor preguntó:
- ¿Y para qué quieres ser un celular?
- Para que mi marido me tenga siempre a su lado, me lleve a dondequiera que vaya, y si un día me pierdo, se vuelva loco por encontrarme.
Hermanos(as):
La tecnología es buena cuando se la usa racionalmente, pero cuando ésta controla nuestra mente y hasta “idiotiza” nuestras acciones, es cuando amamos más a las cosas que a las personas.
Recuerde siempre: "Las personas son para ser amadas y las cosas son para ser usadas". Por favor, ¡no invierta el orden!
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