Autor: NILTON ROGER MAS ROJAS
Cuando las cosas van bien todos se atribuyen los éxitos, pero cuando son adversos echamos la culpa a los demás.
Cuando un alumno es exitoso: "ese fue mi alumno". Cuando no lo es: "es culpa de sus padres".
Cuando un hijo es exitoso: "me sacó a mí". Cuando no lo es: "es culpa de la madre".
Cuando el matrimonio va bien: "soy un buen esposo". Cuando no: "la esposa no me comprende".
Hermanos(as):
Reflexionemos sobre la real influencia que tienen nuestros actos, miradas y palabras ante los demás. Es muy fácil echar la culpa a los demás, pero muchas veces, el éxito o fracaso de quienes nos rodean depende de nosotros.
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