Autor: DESCONOCIDO
Adaptación: NILTON ROGER MAS ROJAS
El sapo y la rosa vivían en un jardín. Eran muy amigos y se estimaban mucho. Un día, la cobra le dijo a la rosa:
- ¡Dios mío!, ¿cómo puedes ser amiga de ese bicho tan feo y asqueroso?
La rosa, confundida, le dijo al sapo que no la buscara más. Y sin saber ni siquiera el motivo, al sapo no le quedó más que alejarse, triste, de ese lugar.
Después de unos cuantos días el sapo volvió al jardín y vio a la rosa marchita y sin vida. Se aproximó a la rosa, y con mucha delicadeza le preguntó qué había pasado.
La rosa respondió:
- Desde el día que te fuiste los insectos me persiguen. Recién he comprendido que eras tú quien los comía para mi.
Hermanos(as):
Nunca desprecien a los buenos amigos por influencia de cobras envidiosas. Aprendamos a amar cada simplicidad de la vida de nuestros amigos.
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